La principal característica del realismo francés fue generar una espantosa forma de ficción que el gran público de una sociedad post-aburguesada aseguró que era un reflejo fiel. Desde las formas satíricas de los "Cuentos de una noche" por George Madison hasta los relatos de barcos hundidos de Madame Viterbo, el realismo francés genera una doble realidad cuyos parámetros subvierten el status quo.
A decir de Winckelmann, la realidad influyó menos en el arte que el arte en la realidad. Esto, de alguna manera, se asemeja al actual concepto de "nube" informática, en que la alimentacion fidedigna del enorme cúmulo de datos que la forman es menos influida por afirmaciones comprobables o siquiera verificables que por afirmaciones del tipo que Azorín bautizara como impresionistas.
Sin embargo, la influencia de las entradas inverificables de la "nube" se reflejan en el pobre desempeño de los alumnos del 5to semestre de ciertas preparatorias que, quitando una y otra palabra aquí y allá a las entradas consultadas, generan un problema de verificación de datos en sus trabajos.